La constante búsqueda de la mejor expresión de nuestro terroir da como resultado este elegante, mineral y estructurado espumante proveniente de los viñedos de Aconcagua Costa, a sólo 12 km del Océano Pacífico. La pronunciada influencia de roca metamórfica en los suelos, combinados con condiciones de clima frío, acentúan la singularidad de esta apelación.
Este Blanc de Blancs muestra un color amarillo pajizo con reflejos dorados, con burbujas muy finas e integradas. Sus expresivos aromas recuerdan a pan tostado, flores secas, cítricos y mazapán. En boca, los sabores a pan tostado se complementan con pera, cítricos, un toque a miel y frutos secos. Es un espumante de vibrante acidez, lineal y muy largo en el paladar. Tras 5 años de guarda en botella, su sensación envolvente y cremosa, lo convierte en un conjunto muy complejo y elegante.
Denominación de origen:
Valle de Aconcagua
Ficha Técnica